La Pascua “Querer vivir por Él
y que viva Él en nosotros”.
En la pascua,
por la fe, nos encontramos con Jesús resucitado en cada momento del día.
Podemos decir con más seguridad un sí al Señor. La Pascua es la prueba patente
de que Dios nunca nos ha abandonado, y además, de que nos muestra cual es su Amor
por nosotros. Un amor que escapa al razonamiento y que sólo se entiende con
nuestra propia vida, Su Vida.
En la Pascua Dios se hace presente en
nuestra vida de forma especial, porque después de haber sido testigos de su
entrega por nosotros, nos hace partícipes, cómplices, hermanos, de esto que nos
da y que nos sigue dando, la vida.
Por eso, vivir
apasionadamente cada momento de la vida junto a Él, por Él y para Él, nos puede
hacer conscientes de cuánto Dios está en medio de nuestras vidas.
Cada gesto,
cada movimiento, cada suspiro, cada sonrisa, cada llanto, cada silencio, cada Eucaristía, vivamos con Él. Por que el Amor de Dios en Jesús nunca murió por
nosotros. Atrévete a Vivirlo.
Pax et Bonum
No hay comentarios:
Publicar un comentario